Christian Martinoli y Luis García, reconocidos comentaristas de TV Azteca, generaron revuelo en redes sociales durante su transmisión en vivo del partido entre Rayados de Monterrey y el Inter de Milán, al lanzar indirectas contra su excompañero David Faitelson.
Martinoli y García han migrado parte de su contenido a plataformas digitales. En el contexto de la Copa Oro, narraron de forma gratuita el partido de la Selección Mexicana a través de YouTube, utilizando un estilo relajado y sin filtros que fue bien recibido por la audiencia. Tras esa experiencia, repitieron el formato en el duelo entre Monterrey e Inter, donde no solo comentaron el juego, sino también respondieron a recientes críticas. 
Faitelson critica el formato digital de “Farsantes sin gloria”
Durante su programa “Faitelson sin Censura” en TUDN, el periodista deportivo cuestionó la propuesta de sus excompañeros. Aseguró que lo que hacen no es periodismo, sino una puesta en escena cargada de “groserías” y “babosadas”.
Faitelson declaró: “Con todo respeto, pararse frente a una cámara y decir cualquier tipo de babosadas, groserías... A mí me enseñaron a hacer periodismo”. También cuestionó si ese tipo de contenido no generaría vergüenza ante sus hijas, sugiriendo que el límite debe ser lo que la familia pueda ver sin incomodidad.
La respuesta de Martinoli y García: “No hacemos periodismo, hacemos divertimento”
Durante el medio tiempo de la transmisión de Rayados vs Inter, Martinoli y García no se guardaron nada. Con tono sarcástico y sin censura, Martinoli respondió directamente a Faitelson:
“Nos venimos a divertir porque lo que no entienden es que esto no es periodismo, es divertimento. Porque el día que yo quiera hacer periodismo también los meo, pero no tengo ganas...”.
Respuestas a las críticas familiares
En reacción al comentario sobre las hijas, Martinoli envió un saludo a la suya, mencionando que tiene la madurez para consumir contenido variado. Luis García incluso invitó a su hija al programa en vivo y le preguntó si sentía vergüenza por su trabajo, a lo que ella simplemente respondió: “no”.
